Hace tiempo lo esperaba, y hoy llegó el invierno. Escondo mis manos bajo los puños del buzo y deambulo a paso lento, como si no supiera a dónde voy. Sé a dónde voy, pero camino a paso lento . Siento el frío seco en la cara y la tranquilidad de la tarde que se empieza a apagar con la llegada de la noche. El tiempo pasa lento, y lo abrazo en el silencio más profundo. Me saco una película y tomo una decisión: cuando llegue a casa me voy a poner el buzo más grande que tenga y voy a mirar la película. El día empezó hoy tempranito. Y fue un día lento.
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4 comentarios:
amiga que buena idea...me re tentaste!!
LIBI
Me voy a conseguir unos guantes dispares; por ejemplo, dos de la mano derecha, para enfrentar este invierno.
Eresfea, si no consigues, yo te prometo que te presto los mios.
¿Escribirás algo más en el blog antes de la primavera? Vamos, vamos...
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